Vacaciones en Asturias para conectar con la naturaleza
Estar en contacto con la naturaleza tiene un sinfín de beneficios para la salud. Por eso, al irse de vacaciones, los destinos llenos de paisajes verdes son las mejores opciones para descansar y relajarse.
Es sabido que una de las mejores curas para los problemas de estrés es estar en contacto con la naturaleza. El rodearse de paisajes verdes, sentir el olor natural de la tierra y de las plantas, ayuda a focalizarse en ése instante y comenzar a soltar las preocupaciones y el estado de ansiedad, muchas veces generado por la universidad, el trabajo, o un ritmo de vida ajetreado.
Es por eso que se recomienda tomar descansos, ya sean estos largos o cortos, para poder desintoxicar la mente y el cuerpo, y permitirse sentir placer. Y qué mejor que lograrlo con un viaje, más específicamente, unas relajantes vacaciones en Asturias, conocida como “el paraíso natural”.
Hermosos paseos para soltar tensiones
El Principado de Asturias es dueño de una historia extensa, que se remonta a más de cinco siglos atrás. Sus tierras, rebosantes de mucha vida natural, atrae a miles de turistas todos los años.
Asturias es, además, sede de históricos edificios, acogedoras casas de piedra y villas marineras llenas de color.
Una de las partes más enriquecedoras de un viaje, es recorrer. Aprovechar a pasear por todos los rincones que el lugar ofrece para perderse y disfrutar. Generalmente, todas las ciudades, provincias y países tienen como tradición ciertas actividades deportivas y turísticas, que sirven tanto para conocer los alrededores, como para ejercitarse.
En el caso de Asturias, se trata del clásico descenso del Sella en canoa, que se lleva a cabo todos los veranos en un gran evento festivo, aunque puede realizarse en cualquier época del año.
El descenso consiste en una de las actividades más populares dentro del turismo asturiano. Es fundamentalmente de carácter deportivo, y reúne anualmente a miles de deportistas y atletas, de la misma manera que invita a todas las personas sin distinción, con la única condición de saber nadar. De hecho, su seguridad garantiza que pueda hacerse también en familia, con niños y mascotas.
Es, sin lugar a dudas, una de las mejores maneras de descargar tensiones, disfrutando de la adrenalina y los paisajes que se despliegan a lo largo de todo el recorrido.
Por si no fuera suficiente, hay otros muchísimos atractivos que visitar dentro del territorio asturiano. La provincia de Asturias forma parte, junto a León y Cantabria, de lo que es el Parque nacional de Picos de Europa.
Este es una de las reservas naturales más reconocidas en el mundo, por lo que no es de extrañar que sea otro de los puntos en el mapa para recorrer.
Grandes lagos, montañas y bosques serán el remedio especial para cualquier preocupación. Y es que en la provincia, se esté donde se esté, el contacto con la abundante flora es permanente.
El imponente panorama rodea hasta a los pequeños pueblos y las villas pesqueras, con sus casitas viejas y callejas desembocando en los muelles, a orillas del mar.
Hospedaje rural y con grandes vistas
Al estar de viaj, pocas cosas son tan relajantes como volver al alojamiento después de un día largo de paseo. Lo que se quiere es descansar y estar cómodo, para reponer las energías. Darse un baño, tomar una cena al aire libre, y disfrutar de la calma del final del día.
En ocasiones, se disfruta más de esto al tener la independencia para manejar el itinerario, sin regirse, por ejemplo, por los rígidos horarios de un hotel. Un apartamento rural en Luarca será entonces la elección más atinada.
Luarca es una de las villas marineras más hermosas de la región, por lo que un hospedaje cercano a la zona rural mantendrá ese contacto natural tan significativo, en el que el paisaje de montaña se une al paisaje marítimo. En ella están además el Mirador de la Regalina y Cabo Busto, dos sitios ideales desde los cuales es posible observar el mar hasta el horizonte.
Pasar unos días despertando en cómodas y acogedoras habitaciones, avistando a través de la ventana el increíble panorama asturiano, puede ser la cura a la monotonía y el estrés para una vida cotidiana acelerada.