Humus de lombriz: el mejor abono natural para tus cultivos
El uso de abonos y fertilizantes en los cultivos resulta esencial para garantizar un desarrollo sano de todas las plantas en cuestión. Sin embargo, parte de la industria agrónoma actual ha puesto el foco en aquellos productos que se producen de manera artificial; rompiendo con la cadena natural de las cosas. Por suerte, hoy en día han llegado artículos que recuperan el valor orgánico que, como el humus de lombriz, plantean múltiples beneficios para la cosecha. Veamos en detalle en qué consiste este tipo de abono y qué ventajas ofrece a los agricultores tanto profesionales como amateurs.
Qué es el humus de lombriz
El humus de lombriz surge a través del proceso conocido como vermicompostaje, consistente en la oxidación biológica no termofílica que transforma la materia orgánica en el humus. La lombriz se presenta como el elemento primordial en este sistema, ya que son las responsables de desmenuzar el sustrato para optimizar la degradación bacteriana. Una tendencia en el mundo de la agricultura del que se hacen eco en los mejores espacios online especializados, como bien sucede en esta web.
En este orden de ideas, conviene señalar que la materia orgánica triturada pasa por el tracto digestivo de la lombriz, momento en el que se mezcla con su microflora y otras enzimas para abandonar el animal en forma de desecho. Es este desecho el que se puede aprovechar a favor de los cultivos, tanto en el momento de la aplicación como con el paso del tiempo.
Para producir humus de lombriz se necesita generalmente un año, empezando con el amontonamiento del estiércol de otros animales y su aireación. Una vez estas pilas se estabilizan, se colocan en hileras para que las lombrices comiencen con el vermicompostaje y, tras doce meses, se extrae en humus. Un proceso completamente natural que está devolviendo el valor orgánico a la agricultura.
Características del humus de lombriz
Antes de entrar en detalles con los beneficios asociados al uso de humus de lombriz, conviene poner sobre la mesa los múltiples beneficios que encontramos en este tipo de abono. El primero de ellos es el alto contenido de nutrientes y de microorganismos beneficiosos para el crecimiento de las plantas, incluyendo nitratos, fosfatos, magnesio, bacterias positivas o, entre otros, actinomices.
Asimismo, el humus de lombriz presenta múltiples hormonas del crecimiento: unos estimulantes bioquímicos que mejoran el desarrollo natural de los cultivos. También tiene una buena cantidad de ácidos húmicos; mientras que queda libre tanto de patógenos como de químicos tóxicos.
Todas estas características demuestran que los abonos o fertilizantes naturales reúnen las condiciones óptimas para las tareas de agricultura, evitando depender de los elementos industriales a los que buena parte del sector se había acostumbrado. Un punto de inflexión en las técnicas de plantar y cosechar que, gracias a la accesibilidad de las tiendas online especializadas en la venta de humus de lombriz, conviene tener presente.
Beneficios para tu cultivo
Ahora que ya tienes más claro qué es el humus de lombriz y qué características presenta este abono orgánico, es probable que hayas visto por ti mismo los principales beneficios. No obstante, profundizamos en la materia para evidenciar que estamos ante uno de los recursos más efectivos a la hora de optimizar la fertilidad de los suelos de cultivo.
Más allá de ser una fuente extraordinaria de suministro de nutrientes, mejorando la formación de agregados del suelo, el humus de lombriz tiene la capacidad de retener el agua. A su vez, incrementa la calidad de la estructura del suelo, previene la erosión y evita la lixiviación, derivando en un efecto amortiguador que aumenta la salud de la plantación en general.
Igualmente, conviene señalar que el humus de lombriz aumenta la oxidación de sustancias orgánicas complejas y alimenta los microorganismos favorables para las plantas. Es decir, el cultivo tendrá todos los nutrientes y agentes actuando a su favor. Todo esto hace que el crecimiento de las plantas sea impecable y se mantengan ajenas a un amplio volumen de enfermedades. Razones más que suficientes como para pasarse a los abonos orgánicos como este.