Genera y autoconsume tu propia energía
Todo lo que concierne a las energías renovables ha logrado abrir una innovadora manera de consumir energía eléctrica en todas partes del mundo. Un ejemplo claro a lo que hace referencia al autoconsumo eléctrico en la actualidad.
El auge que se ha venido presentando durante los últimos años se ha debido a que la instalación de tecnología de vanguardia ha hecho posible que cada vez resulte mucho más accesible todo y los trámites administrativos también han reducido su complejidad.
Ahora, en las siguientes líneas, vas a descubrir las mejores formas de ahorrar en la factura eléctrica mientras se lucha contra el cambio climático y considerar el certificado energético.
Las energías renovables y el autoconsumo
El empleo de las energías renovables para producir electricidad es una tendencia que se encuentra al alza en lo que respecta al escenario mundial. Pero esto no solo aplica a gran escala, como ocurre con las empresas generadoras y distribuidoras de energía eléctrica, sino también a una escala menor, como los consumidores.
La cultura del autoconsumo, que ha innovado el esquema convencional de la generación de energía eléctrica en centrales que es distribuida hasta nuestros hogares, les otorga a los consumidores la posibilidad de generar su propia energía. Entre los principales beneficios que tiene para aportar el autoconsumo eléctrico se vale mencionar e incluso destacar la reducción de gastos y una autonomía muy superior.
Consumo eléctrico y sus beneficios
Todo lo que concierne al autoconsumo eléctrico se describe cuando las empresas o personas particulares consumen energía que proviene de instalaciones de producción cercanas a las de consumo y relacionadas con las mismas. Un ejemplo sumamente claro de este fenómeno son los generadores mini eólicos y los paneles fotovoltaicos.
Además de que esta alternativa permite ayudar a frenar el cambio climático al emplear energías renovables y de las ya mencionadas, esta opción de consumo también presenta otras ventajas que afectan positivamente tanto a los consumidores como a la sociedad en general. Algunas de estas son las que te vamos a presentar en el siguiente listado:
- Ahorro considerable en las facturas eléctricas.
- Promueve la reducción de la huella de dióxido de carbono de los consumidores y permite el fomento hacia la transición energética.
- El desarrollo de esta va a impulsar la electrificación del transporte, así como la conversión ecológica de las ciudades.
- Una generación eléctrica de este tipo va a mejorar la gestión de la demanda, tanto a una escala particular como colectiva.
- Promueve el desarrollo y la creación de los puestos de trabajo ecológico en empresas sostenibles que requieren de un certificado de eficiencia energética.
Ahora, vamos a repasar tan solo algunas de las principales alternativas de autoconsumo que se encuentran relacionadas con las diversas formas de generar energía eléctrica:
El autoconsumo fotovoltaico
Este tipo de energía va a requerir de la instalación previa de paneles solares dado que está basada en el aprovechamiento de la radiación solar con el objetivo de producir energía eléctrica.
A pesar de que la era contemporánea de la energía fotovoltaica tuvo sus inicios en 1954, cuando Laboratorios Bell descubrió de manera accidental que los semiconductores de silicio dopado con impurezas eran sumamente sensibles a la luz, estos paneles no se produjeron en masa hasta bien avanzados en los noventa.
El “boom” de esta alternativa energética se generó gracias, puntualmente, a las innovaciones tecnológicas que provenían de distintos ámbitos como la carrera espacial y el descenso de los precios. Este último punto dado que la economía de escala hizo que el coste medio de generación eléctrica se volviera mucho más competitivo con respecto a las fuentes energéticas clásicas en un gran número de espacios geográficos. Es por este y otros motivos, que las placas solares se convirtieron en un elemento bastante habitual en todo el paisaje rural y urbano en muchas partes del mundo.
Autoconsumo mini eólico
Este tipo de energía se encarga de aprovechar al máximo la fuerza del viento, es decir, la energía cinética, y la posiciona como la principal productora de electricidad a través de generadores de dimensiones reducidas. Esta es una de las principales diferencias que presenta con respecto a la energía eólica, su hermano mayor.
La energía eléctrica que se obtiene a partir de estos aerogeneradores de menor tamaño se tiende a emplear a fin de cubrir las necesidades domésticas del hogar. Un aspecto muy provechoso que la convierte en una de las alternativas favoritas al momento de apostar por el autoconsumo eléctrico.
El funcionamiento que presentan los aerogeneradores mini eólicos también está basado en el giro de uno o varios rotores que se ven impulsados por el viento. Este rotor, dado que se encuentra conectado a un generador, va a producir electricidad en corriente alterna.
En cuestión, los aerogeneradores que se encuentran más extendidos son aquellos que se identifican por su eje horizontal, a pesar de que las necesidades propias de los entornos urbanos hayan derivado en que durante los últimos años surgieron soluciones que presenten ejes verticales.
Estos sistemas de autoconsumo eólico en la actualidad llegan a compartir una gran parte de sus elementos con los fotovoltaicos, sin embargo, específicamente se encuentran formados por:
- Autogeneradores: estos van a producir electricidad a partir de la fuerza que genera el viento, sin importar que sea de día o de noche y presentando una potencia que, por lo general, tiende a ser inferior a los 100 Kw.
- Reguladores: estos elementos van a presentar la misma función que generalmente realizan en los sistemas fotovoltaicos, aunque en este proceso son menores los picos energéticos que se provocan.
- Acumuladores: muy similar a la función que tienen en los sistemas fotovoltaicos, aunque en estos sistemas particulares la fuerza del viento va a ser mucho más recurrente que en el caso del aprovechamiento de la radiación solar.